La vida… ¿qué es la vida?
La vida sin amor, sin justicia, sin
ética ni moral no vale nada.
Un patio inerte que padece sin el
clamor de las voces de los niños.
Un templo sin columnas de polvo
entumecido,
una barca a la deriva, sin rumbo y
varada,
querer vivir sin redes y al filo de un
inmenso vacío.
¿Qué es la vida para el impío?
Siempre luchando por sobrevivir,
aferrado a la superficie,
siempre cercano a su mejor valedor, al
que más le agrada,
enamorado de su estupendo coche,
corazón que corroe una réplica de su
magnífica casa,
ambiciona el derroche... su cartera
llena, mientras la tuya adelgaza.
Detrás de una máscara, su personalidad
esconde,
Casanova de agrados y besos,
bufón que a su rey ríe las gracias.
Palidece ante la tempestad que se
impone,
se desestabiliza como un castillo de
naipes.
Un presente y un futuro de vicisitudes,
¡como vil cobarde te apartas,
presentando tu verdadero semblante!
¡Qué bien supiste guardar tus cartas!
¡Quién te vea, no quiera saber tu
nombre!
Tú alma chirria como rueda que varillas
le faltan,
tú alma es como de bestia, no como de
hombre,
como serpiente que se arrastra,
buscando una nueva presa al amparo de
la noche.
Si por quererte, yo no te quiero,
por amarte, yo no puedo.
Es más fuerte en mí el poder,
¡qué me puede… el amor al dinero!
¿Qué es la vida para el justo y bueno?
Contempla como se impone la injusticia
y la maldad del mundo…
y él va y se levanta.
Se encuentra enfermo, débil, castigado
y sin aliento…
y él va y se levanta.
Abandonado por multitud de familiares,
amigos y alumnos…
y él va y se levanta.
Inmensa melancolía sufre, ante la falta
de los buenos que estuvieron alrededor suyo…
y él va y se levanta.
Se asoma en el horizonte la aurora de
la oscura noche…
y él va y se levanta.
Cuando la malina muerte venga a
reclamar el último expiro de sus pulmones…
él va y se levanta.
Una paloma surca el aire, va en su contra.
Le da fuerzas su esperanza.
M.A.M
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